Samuel GoldwynSamuel GoldwynWikipedia, nacido como Schmuel Gelbfisz (Varsovia, 17 de agosto de 1891 – Los Ángeles, 31 de enero de 1974) fue un productor de cine estadounidense de origen polaco, ganador del Óscar de la Academia y del Globo de Oro, fundador de varias productoras. Cofundador de la Metro-Goldwyn-Mayer.
Dotado de gran talento e inventiva, en su casi medio siglo de actividad produjo numerosas películas de calidad, especialmente en el género del melodrama y de la comedia musical, siendo a su vez descubridor de grandes talentos, tanto en el mundo de la dirección, como Cecil B. DeMilleCecil Blount DeMilleWikipedia y William WylerWilliam Wyler
Wikipedia, como en el de la interpretación, con actores como Gary CooperGary Cooper → Frank James Cooper
Wikipedia, David NivenJames David Graham Niven
Wikipedia, Danny KayeDanny Kaye
Wikipedia, Lili DamitaLili Damita
Wikipedia y Eddie CantorEddie Cantor
Wikipedia.
Es más conocido como productor de cine. A pesar de que pasó la mayor parte de su vida en la industria del cine, en realidad comenzó a trabajar en el negocio de la ropa, donde se convirtió en uno de los vendedores con más éxito en el sector del guante para una empresa con sede en Nueva York, con el tiempo llegaría a ser vicepresidente de ventas.
Probablemente por el hecho de que el inglés no era su lengua materna, Goldwyn también era conocido para cometer errores del habla. Esto llegó a ser conocido como «goldwynismos» que se define como
Una de las características que destacaban de Goldwyn, además de lo antes mencionado, es que junto con el malapropismo y el spoonerismo dieron nombre a formas especiales de hablar y de deformar el lenguaje. En los años cuarenta, la peculiar utilización del vocabulario que hacía Godwyn se convirtió en uno de los cuchicheos mas concurrentes entre los guionistas y la prensa. Lo usaban para ridiculizar al magnate inculto y extranjero, y a la vez como método para adularlo, cosas que a veces se confundían y hacían difícil distinguirlos.
Llego un momento que hasta Goldwin se hartó y decidió que no eran suyas esas frases atribuidas con un:
Vamos a recopilar unas cuantas de esas frases que lo ha encumbrado como líder en el ranking de personas especializadas en dar patadas al diccionario:
Estoy dispuesto a admitir que no siempre puedo ser correcto, pero que nunca soy incorrecto.
Si miro confuso es porque estoy pensando.
Creo que nadie debería escribir su autobiografía hasta después de muerto.
Un hospital no es lugar para estar enfermo.
La razón por la que muchas personas se presentaron en su funeral es que querían asegurarse de que estaba muerto.
Las películas están para entretener, los mensajes deben ser enviados a través de Western Unión (por correos).
Si pudiera caer muerto en este mismo momento, sería el hombre más feliz del mundo.
Es absolutamente imposible, pero tiene posibilidades.
No se puede reír con nuestras comedias.
Me he acostado con un resfriado intencionado.
A cualquier hombre que vaya al psicólogo tienen que examinarle la cabeza.
Quiero hacer una película sobre la policía secreta rusa: el GOP (el partido republicano americano).
Amo el suelo que piso.
Para este papel quiero una dama, alguien que sea condesa.
Un contrato verbal no vale ni el papel en el que está escrito.
Caballeros, incluyanme fuera.
Puedo responder con dos palabras: im-posible.
Ya hemos pasado por mucha agua desde entonces.
Hundiría mi cabeza en un alce.
Cualquier cosa que diga ese hombre te lo tienes que tomar con una dosis de sales.
Quiero ir a donde la mano del hombre no haya puesto el pie.
«Da igual, págale lo que pida», contesto el productor.