Desde que el mundo es mundo el privilegio existe. Y existe porque la mayoría de los humanos somos imbéciles. Recuerdo cuando hace 25 años podía acceder a todos los sitios porque tenía un coche de precio prohibitivo. Estudie en un colegio privado en el que, los que tenían dinero aprobaban y el resto se daba en los alambres. Os dejo una historia gráfica que os lo explica perfectamente, con un final cierto, jodido y real que os dejará un mal sabor de boca.